El Destello vuelve al juego: nuevo dueño, nueva carta y el mismo espíritu arcade

El icónico bar de Palermo que marcó una época revive con estética retrofuturista, tragos de autor y una propuesta gastronómica de alto nivel.

Ubicado en Gascón 1460, en el corazón de Palermo, El Destello resurge con una nueva identidad que mantiene vivo su ADN arcade. Con máquinas de juegos como Pac-Man, Tetris, Street Fighter II, Snowbros y más, el espacio se consolida como un refugio para fanáticos de lo vintage y la cultura gamer.

El bar, de 130 m², ofrece una ambientación retro wave, luces de neón originales e iluminación retrofuturista que transportan al visitante a otra época. Las máquinas arcade, tanto restauradas como diseñadas especialmente, convierten a El Destello en una verdadera experiencia inmersiva.

Gastronomía elevada y cócteles con sello propio

La propuesta gastronómica acompaña la renovación con una carta que rota cada seis meses. El menú incluye opciones como hamburguesas, tacos, pizzas, tequeños y platos especiales como los farfales. Además, los tragos son de autor, elaborados con ingredientes de calidad y pensados para maridar con la experiencia lúdica.

Un nuevo capítulo de la mano del Grupo Miz Juegos

En abril, El Destello fue adquirido por Fernando Suárez y Julián Mizrahi, del Grupo Miz Juegos, responsables de bares temáticos como Jobs y Flynn’s. Con esta incorporación, el grupo busca seguir consolidándose en el mundo gastronómico con identidad lúdica.

“Estamos armando una empresa que opera negocios gastronómicos de bares temáticos. Nos entusiasma sumar El Destello a la carta de marcas porque está muy relacionado a lo que hacemos”, afirmó Julián Mizrahi.

La idea a futuro es clara: crear un pool de marcas y abrir nuevas sucursales en distintos puntos del país. Incluso, no se descarta el modelo de franquicias a corto plazo.

Un espacio donde el juego y la gastronomía se cruzan

La renovación de El Destello no solo representa el regreso de un clásico, sino la consolidación de una propuesta donde la nostalgia, el diseño y la buena comida se encuentran. Ideal para una salida distinta, el bar invita a jugar, comer bien y vivir una experiencia auténtica.

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